A Paco se le olvidan a menudo las cosas que planificamos con bastante antelación, así que le he preparado para su despacho un calendario permanente para que pueda organizarse mejor.
Os explico cómo lo he hecho. Primero he forrado con tela una chapa metálica de tamaño suficiente para que pudiera encajar bien en un marco que compré en Ikea. Luego pegué un imán a unas libretillas pequeñas que compré en los chinos (una para cada día de la semana) y las coloqué en filas de cinco semanas para que aproximadamente pudiera quedar a la vista un mes entero. En las libretillas escribí el nombre y el número del mes (un color diferente para cada mes para que sea más fácil diferenciar unos de otros). Cuando van pasando los días se van arrancando los papeles que corresponden al mismo, y quedan a la vista los siguientes que están escritos en las hojas de debajo.
Los nombres de los días de la semana están pegados a la tela porque son permanentes.
Ahora a Paco se le siguen olvidando algunas cosas, pero sólo las que no apunta en el calendario…
sábado, 22 de octubre de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Pincha aquí y déjame un comentario